La parlamentaria Andina Elsa Malpartida ha sido acusada por el diario El Comercio de haber sido integrante de Sendero Luminoso, y “pertenecer a la organización terrorista Sendero Luminoso (SL) entre los años 1989 y 1994”. (1) Ella ha retrucado en una conferencia de prensa indicando que nunca perteneció a Sendero Luminoso, y que como ella miles de campesinos se acogieron a la ley de arrepentimiento, que en sus disposiciones complementarias indicaba que aquellos campesinos que hubieran sido sojuzgados por los terroristas se podían acoger a los beneficios de la ley siempre y cuando se mantuviera la condición de secreto del acuerdo.
La parlamentaria dejo en claro que El Comercio ha dejado expuestos a miles de personas en relación al acuerdo de confidencialidad, y denuncio que del Ministerio del Interior ha salido la información y que es probable que la suya no sea la única información disponible, por lo que habrían muchas personas en riesgo de ser víctimas de las represalias de la organización terrorista. Uno de los periodistas en la conferencia de prensa le pregunto cuál era el problema con la información dada por el diario si la ley señala que el estado de secreto del acuerdo solo tiene una vigencia de 10 años, y ese tiempo ya había transcurrido. Ella respondió que aún ahora son asesinadas personas en el lugar donde ella ha vivido y viven sus hijos, por lo que tuvo que traer a su hija a la ciudad de Lima. También ha denunciado que El Comercio habría pagado por obtener la información lo que sería un acto de corrupción.
El decano de la prensa nacional ha respondido: “El Comercio no utiliza estos métodos. Los repudia como práctica periodística. En nuestra misión de indagar e informar sobre la conducta y transparencia de los altos funcionarios públicos y de quienes representan a la sociedad, nos debemos a nuestros Principios Rectores y compromisos éticos y de rigor con la verdad. Rechazamos, pues, en todos sus términos, las expresiones de la militante humalista, subrayando que no ha aclarado, hasta hoy, su anterior militancia en Sendero Luminoso”. (1) Tal vez una forma de ilustrar el escenario en el que se desenvolvieron los hechos en aquella época sea necesario recurrir a los informes de la Comisión de la Verdad. En un pueblo llamado Paraíso los «narcos» llegaron a un acuerdo con los «terrucos» para explotar y comerciar la droga ofreciendo su «protección». De las pistas de Paraíso salían en promedio 10 a 15 vuelos diarios de avionetas, con 500 a 1000 kilos de droga cada una, hacia Colombia, y hacia otros países. Al llegar a Paraíso entre 1984 y 1986, Sendero Luminoso “no sólo fue organizando todos los sectores poblacionales de Paraíso sino también las zonas de cultivos alrededor de Nuevo Progreso, Tocache y Uchiza, controlando paulatinamente el campo. Los patrones que antes tenían carta abierta para presionar a los campesinos con sus bandas de sicarios se vieron obligados a acercarse más hacia las zonas urbanas por miedo a que los agricultores informaran a los delegados de los comités populares.
El dinero a raudales, la prostitución, la vida «a cuerpo de rey» de los mafiosos, eran las características de Paraíso, mientras los esporádicos operativos policiales no les causaban mayores pérdidas, porque estaban en una zona estratégica y por la venalidad de los jefes de la patrullas que llegaban de Tingo María, donde según indicios los jefes del narcotráfico y de la subversión tenían su centro de coordinación y control de operaciones”.
El 4 de octubre de 1989 en Paraíso ocurrió un gigantesco operativo de la policía antidrogas con la ayuda de la DEA norteamericana, con el resultado de 36 narcotraficantes muertos y seis policías heridos. Según la prensa, se destruyeron varios laboratorios de procesamiento de drogas y pistas clandestinas. Oficialmente, se consideraba a Paraíso el principal centro acopiador de droga hacia Estados Unidos, concentrándose en ese lugar importantes jefes regionales del narcotráfico, entre ellos Máximo Pérez Salas, alias «Machi». Durante varios años «Machi aceptó» las condiciones impuestas de Sendero Luminoso, pero rompió sus acuerdos en 1987 por los excesivos cupos y le «declaró la guerra» a Sendero Luminoso. Con la ayuda de la policía armó un «ejército» de cien hombres y vistiendo uniforme policial «con rango de mayor o comandante» fue de Paraíso hasta Ramal de Aspuzana matando a cualquier persona que consideraba senderista.
En el mes de octubre de 1987 Sendero Luminoso tendió una emboscada a «Machi», de la que sale librado para refugiarse en el «bunker» que había construido en Paraíso donde resiste el ataque con centenares de miembros del PCP-SL. «Machi» solicitó ayuda por radio al ejército, que acudió con tres helicópteros artillados, disparando fuego graneado y lanzando «Roketts», convirtiendo en segundos el cuasi triunfo senderista en derrota, con la muerte de muchos de sus militantes el 15 de octubre de 1987.
Las personas que optaron por protegerse por la Ley de Arrepentimiento tienen todo el derecho de elegir y ser elegidas. El diario El Comercio ha obrado de mala fe debido a que la información que ha revelado no aporta a la institucionalidad del país, más bien disminuye la confianza de la población en el Congreso, en la protección de la Ley y finalmente en la prensa, sobretodo en el decano de la prensa nacional.
Aliensombra
(1)http://elcomercio.pe/impresa/notas/elsa-malpartida-no-le-conto-humala-su-filiacion-sendero/20091104/364105
(2)http://www.cverdad.org.pe/ifinal/pdf/TOMO%20IV/SECCION%20TERCERA-Los%20Escenarios%20de%20la%20Violencia/Historias%20Regionales/1.4%20REGION%20NOR%20ORIENTAL.pdf
No comments:
Post a Comment